El post del entretenimiento de enero

Al lío. Estas son las reseñas, con más cariño y tiempo, de lo que he visto y leído en enero.

Los libros

 "Sherlock Holmes de Hayao Miyazaki", Sergio Colomino, 2020

Tenía ganas de leerme este libro-análisis sobre la muchas veces olvidada Meitantei Holmes. Disfruté mucho la serie en su día, pero el análisis de Colomino me está dando ganas de volver a disfrutarla, libro en mano, para fijarme en tantos y tantos detalles pasados por alto en aquel primer visionado (cuando también me estaba familiarizando con el canon original). Se nota mucho el cariño y mimo del autor al hablar de este anime y el trabajo de investigación que lleva detrás para recoger hasta el último de los datos. Y, sobre todo, sin que le falten momentos en los que señalar errores o aquellas partes en las que pudo ser mejor. Porque que algo te guste no debe ser óbice para reconocer sus imperfecciones y desear que se hubiera hecho mejor. Disfrutada cada página del libro, cuidado tanto en la redacción del texto como en el maquetado (algo de agradecer, porque últimamente no encuentro ni un libro con algún fallo, aunque sea minúsculo, y que me saca de situación por completo).

Valoración: 9/10

"La red púrpura", Tres Hombres, 2019

Continuación directa de la historia empezada en "La novia gitana". La historia es un thriller de los de ahora. Ritmo rápido, una sucesión de nombres de los que cualquiera puede ser culpable. Ritmo rápido, que no da apenas pie a descansar. Y tampoco apetece, porque la información es continua, según cada aparición va revelando nuevos secretos, pero no todos. Si bien muchas veces los personajes parecen impedir una y otra vez la resolución final del caso, y aunque al final vemos un villano-ex-machina no desmerece la sucesión capítulos, especialmente por esos momentos en los que los protagonistas pierden sus oportunidades. El final, un tanto cerrado, aún sabiendo que existen dos secuelas más -aunque, de momento, aguardaré y continuaré otras lecturas para no saturarme-. Lo más terrible puede ser pensar cuántas redes púrpura pueden existir por el mundo, y que muy probablemente en esta novela solo haya una versión azucara de la realidad, que no es cosa pequeña.

Valoración: 8/10

"La esfinge", Robin Cook, 1979

Supongo que antes o después, topamos con alguna piedrecita en el camino de un autor. He leído un buen puñado de novelas de Robin Cook (que no todas, ni de lejos) y esta es la primera vez que tenía más ganas de terminar que de ver avanzar la historia. Lo considero una oportunidad perdida, ya que los tres primeros capítulos prometen bastante sobre la historia alrededor de la tumba de Tutankamón y Seti I, pronto torna en ir moviendo a Erica Baron, la protagonista, de un lado para otro en un mar de nombres. Quizá alguien más versado en estas lides es capaz de seguir mejor los movimientos constantes, pero a mi me sacaba de historia una y otra vez. Es raro, porque en sus thriller médicos, aunque soy un lego en la materia, logra engancharme bastante más. Y además la diferencia del ritmo, ya que parece desarrollarse todo muy despacio mientras que el final prácticamente se precipita, como si se le estuvieran acabando los folios. Pero bueno.

Valoración: 5/10

"Crónica del pájaro que da cuerda al mundo", Haruki Murakami, 1994

Es terrible cuando empiezas un libro con una buena premisa, o al menos, lo bastante interesante como para continuar leyendo sus páginas, y terminas deseando terminarlo. Le sobran la mitad de las páginas. Creo que Murakami quería concentrar demasiadas historias en esta novela, y el problema es que parecen o son tan ajenas al hilo principal de la historia que solo podía pensar "¿pero esto a mi qué me importa?". Se puede contar lo mismo en la mitad de espacio porque al final he terminado leyendo muchos pasajes en diagonal. Por no hablar de lo irreales que me resultan los personajes, algo medio comprensible teniendo en cuenta sus naturalezas, pero que se me antojan completamente impostados. Qué rabia. Murakami me ganó en su día con 1Q84 pero los siguientes libros suyos que me he leído han acabado en decepción.

Valoración: 3/10

Las series

His Dark Materials (temporada 3)

Tras dos temporadas excelentes (meritorio teniendo en cuenta que la segunda novela de toda la trilogía es, en mi opinión, la más floja de todas), la tercera y última no defrauda. Mantiene el nivel muy alto, y las licencias que se toma Jack Thorne adaptando el guión mantienen la esencia de la historia original. Y no solo eso. Las actuaciones, de diez. Y la ambientación, una maravilla. Te llega todo al corazón cuando te tiene que llegar. Mis dieces. Si tuviera que pensar en la adaptación a pantalla más fiel de cualquier cosa que haya leído, sin duda, sería esta serie. Punto negativo: que se acaba. Punto positivo (y doloroso): que respeta el final de Phillip Pullman en lugar de plantear hacer uno más comercial como suele ocurrir con estas cosas. Bra-vo.

Valoración: 9/10

Machos Alfa (temporada 1)

La nueva serie de los creadores de "Aquí no hay quien viva", "La que se avecina" y "El pueblo" resulta un soplo de aire fresco en su trayectoria. Es divertida sin dejar a ser tronchante, pero juega a su favor que el reparto de personajes -donde sí que mantienen su sello identitario a base de un elenco bastante amplio-, partiendo de que sigue siendo una comedia, no se muestran tan estereotipados como en sus anteriores trabajos, aunque siempre tienen su puntito de ir unas décimas por encima del ciudadano promedio. También es un poco forzado, a causa de lo que quiere mostrar el guión, que los cuatro amigos protagonistas estén todos en el punto de tener que aprender los nuevos modelos de masculinidad sana, pero al final su amistad parece más el "punto común" para mostrarlos juntos ya que cada uno atraviesa un momento diferente de su experiencia vital. Perfectamente podrían ser cuatro personas ajenas entre sí, y el resultado no habría variado mucho.

Valoración: 7/10

Doctor Who (temporada 5)

Increíble. Muy top. Matt Smith toma el relevo de David Tennant a la perfección, y sabe mantener el toque del Doctor en su propio estilo. Y después del personaje de Donna (a quien el fandom le parece tener mucho cariño, y me puedo ganar varios enemigos al decir esto, pero yo no la trago), Amy Pond encaja a la perfección como nueva companion. Y no solo ella, sino que Rory se suma al plantel sin forzarlo. La historia queda muy bien hilada, casi sin darnos cuenta, a lo largo de los capítulos (chapó especialmente por el de Vincent Van Gogh) para ofrecernos un final de temporada en dos episodios que dan ganas de aplaudirlo. Una maravilla. Tengo que ver alguna temporada más de este Doctor antes de que acabe el año.

Valoración: 9/10

Las películas

"Pinocho de Guillermo del Toro" (2022)

La segunda versión de "Pinocho" que salió el año pasado. Mientras que la de Disney solo fue una versión sin cafeína y sin lactosa de su original de 1944, Guillermo del Toro se come el pastel por completo. El estilo ambiental queda de diez, los personajes son muy característicos y reconocibles en esta versión oscura de la historia (a la que no le hace ningún mal alejarse del original de Carlo Collodi). El tono general de la película resulta muy maduro, sin que por ello la marioneta de madera llegue a caer antipática. Ver el mundo a través de sus ojos en contraste con el resto de los personajes, con el plus añadido de ubicar la acción en pleno auge del fascismo italiano (y aplaudo con las orejas la burla a la cara que hace Pinocho a Mussolini) nos dejan una cinta disfrutable, interesante, una buena versión del personaje que brilla por su tono propio. ¿Lo mejor? La clasificación PG, que la habilita para ser vista por niños. En compañía de sus padres, por supuesto, pero siempre he considerado que las obras de ficción que tratan temas como esta película (como la represión, la guerra, o la muerte) son una herramienta para ayudar a entender cómo funciona el mundo, sin que se pierda aún así el mensaje de que las cosas pueden ir a mejor.

Valoración: 8/10

Vuelta al blog por no-se-cuánta vez

Al lío. Llevo mucho tiempo pensando en volver a escribir por aquí. Pero tengo más que comprobado que escribir no es algo que se tenga que hacer, sino que tiene que salir hacer. He estado muchas veces a punto de ponerme al teclado para volver, pero simplemente los momentos han pasado. Probablemente porque pensaba en enfocarme en escribir sobre el aquí y el ahora. Y al final es un error, porque para eso tengo mi Twitter, donde voy, pongo la burrada de turno, y sigo con mi vida. Un blog, mi blog, no debería ser así. Quiero tomarme mis tiempos de reflexión, corregir antes de publicar. Alejarme un poco del mismo contenido que pongo en redes sociales. Que bueno, al final se limitan a ser Twitter y Mastodon. Ni Facebook, ni Instagram, ni nada de eso. De hecho, una de las entradas que quiero publicar este año es al respecto de eso.

Así que estoy organizando ideas para escribir más largo y tendido de asuntos que me apetece que queden plasmados más tiempo en alguna parte. Como tantos hilos interesantes que veo por Twitter y que quedarían tan bien plasmados en alguna web escritos.

Leía esta mañana que la desventaja de los blogs hoy en día es el posicionamiento SEO. Pues, sinceramente, me la pela el SEO, el posicionamiento, y lo que sea. Quiero recuperar el escribir por gusto, el compartir ideas maduradas y releídas antes de darle al botón de publicar. Y mi espía del FBI sabe muy bien la de tuits que no he ido a poner pero que han estado en la pantalla de texto con mi dedito acercándose al botón publicar. Esto es diferente, es otro estilo. Más perteneciente, sin duda, a la década pasada. Pero he visto el mundo degenerarse tanto en estos diez años, si cabe, que me apetece recuperar unas costumbres antiguas. Aunque a nadie le importe. Esto es para mi. Y puede que este mes publique cinco entradas y hasta marzo no vuelva a publicar nada. Pues de acuerdo. Esto es entretenimiento.

Sí quiero dedicar una entrada al mes, mínimo, para compartir un poco de lo que pongo en Twitter: reseñas más extensas sobre los libros, series y películas que voy viendo a lo largo de los meses. 240 caracteres no les hacen justicia realmente. O quizá sí. Pero un texto más extenso, sin regresar a los post exclusivos.

¿Continuaré, no? Espero que sí. Pero bueno. También esperaba en 2020 terminar un fanfic que tenía entre manos, y mientras sigo esperando por acabarlo ya tengo ideas para un par de novelas originales. El tiempo dirá qué sale de ahí.

 Salud y república.