Breve reflexión sobre las leyes antipiratería

Ayer me encontré con un dato curioso. Hadopi, el organismo francés que vigila la piratería en el país vecino, ha anunciado una caída en la cantidad de descargas.

Aquí podríamos acojonarnos un poco, ¿no? ¡Oh, no, tienen éxito, no vamos a poder seguir descargando! Sin embargo, continué leyendo, porque me resultaba chocante, y me encuentro que... a pesar de que las descargas bajan, las ventas no suben.

Eso cambia totalmente los resultados. Ahora toca pensar... ¿qué pretenden en realidad las leyes antipiratería? ¿Frenar las descargas solamente, o intentar que suban las ventas también? Si se trata de lo primero, objetivo logrado. Pero si la gente no consume, ya sea por la vía comercial o la "de estrangis", ahí hay un golpe directo a la cultura.

¿De qué le serviría a, por ejemplo, David Bisbal, que nadie se bajara su nuevo CD, si tampoco lo compran? De nada. En cambio, simplemente si se lo bajan, la gente accede a nuevas canciones (pongo canciones, aunque estoy seguro de que muchos como yo no crean que tenga que llamarlas así, pero para gustos...), y si les gustan, y el tío monta un nuevo concierto, va a tener más gente que si presenta su repertorio más conocido, que la gente se conocerá, y hasta los fans se habrán cansado, al menos en parte, de escucharlo.

Otro tanto para la industria del cine. Si una película nadie va a verla al cine, ni se la bajan... ¿para qué molestarme en verla? ¡Esa película tiene que ser mala de cojones!

Aquí recomendaría a los que intentan que la gente no descargue, que reflexionen un poco. ¿Merece la pena lo que están montando? ¿En serio? ¿No podrían hacer algo que aseguraría el ascenso de las ventas, como bajar un poco los precios?

Bueno, y para cerrar, el enlace al artículo sobre el descenso de las descargas, en bandaancha